Blog ANLOAR

Blog con novedades, promociones y noticias del sector.

 

Cajas fuertes para casa: Recomendaciones y consejos.

Las cajas fuertes para casa son tendencia en los últimos años por la gran variedad de modelos que se ajustan a todas las necesidades que plantean los usuarios. Como dispositivos de seguridad, deben cumplir con unos estándares de protección exigidos para satisfacer a los compradores, sin que supongan un coste muy alto.

En Anloar Sistemas de Seguridad, contamos con un amplio catálogo de cajas fuertes ideales para instalarse en una vivienda, con diferentes características: de sobreponer, empotrables en la pared, camufladas, etc. Por ello, si tiene intención de adquirir una caja fuerte o similares, le recomendamos informarse bien antes de comprar, para saber qué tipo de producto necesita.

¿Por qué cajas fuertes para casa?

Las cajas fuertes en su origen fueron (y siguen siendo) elementos preparados para guardar objetos de valor o dinero de una institución, banco o negocio. Actualmente muchas personas cuentan con bienes similares de alto valor dentro del domicilio. Estos bienes, que habitualmente son joyas, documentación o dinero en efectivo y en muchas ocasiones sus propietarios desean guardarlos en un lugar seguro. Ya sea para evitar su robo, como prevenir una posible pérdida y ahorrarse solicitar duplicados en caso de documentación importante.

Otra razón por la que muchos terminan por adquirir una caja fuerte es la reducción en la póliza dentro del seguro de hogar. Por lo tanto, siempre recomendamos contactar con el seguro antes de ejercer la compra, así tener en cuenta todas las posibles bonificaciones a las que optar por la posesión de un dispositivo de seguridad.

Uno de los casos más comunes que encontramos en Anloar, es la adquisición del maletín ignífugo FP, un dispositivo de tamaño similar a una caja de herramientas. La diferencia está en que contará con propiedades ignífugas, que previenen la destrucción de documentos en caso de incendios.

Tipos de cajas fuertes:

Tradicionales, de sobreponer.

Este tipo de cajas son las “clásicas”, aquellas que no necesitan ningún tipo de instalación y pueden estar ubicadas encima de un mueble o escondidas en un armario. Su denominación es por su colocación, ya que se sobreponen en una superficie. Al ser muy común, las cajas fuertes de sobreponer cuentan con una gran variedad de modelos, tamaños, pesos y grados de seguridad. Dentro de las más solicitadas, encontramos la Serie 600, Serie 800 y Serie 1000 de Ollé, incluso cajas más pequeñas como las series Mini Vault y Minibank.

Empotrables en pared.

Se caracterizan por necesitar una instalación, con el cuerpo de la caja dentro de la pared y dejando a la vista solamente la puerta de la caja. Para instalarse, se llevará a cabo una pequeña obra, donde se debe contar con un espacio un poco más grande que la propia caja.

Al igual que las anteriores, muchos de los modelos que se encuentran en formato sobreponer, tienen un homólogo empotrable en pared. Un ejemplo de ello son nuevamente la Serie Jade. También existe el caso de cajas homologadas con posibilidad de empotrarlas en pared, como la Serie PR.

Camufladas.

Las cajas fuertes de camuflaje son las más destacadas en los últimos años. Cuentan con el mismo mecanismo que una caja fuerte de empotrar, pero con la diferencia de situarse en el suelo o en pared, con un diseño que permite camuflarse fácilmente.

Aunque cuentan con menos cantidad de modelos, pero añaden el factor escondite a la propia seguridad de la caja. Las más recomendadas son la camuflada en pared CFC de enchufe o las camufladas CFC de suelo o Serie Suelo.