Últimamente ha entrado en tendencia el instalar caja de caja fuerte en pared, una nueva forma de conseguir seguridad que adopta un gusto por la estética. Desde Anloar, compartiremos los procedimientos que deben seguirse para realizar una instalación de estos tipos de productos.
Primer paso: Elegir bien la caja que se necesita.
Este paso, por muy sencillo que parezca, es el más importante de todo el proceso de instalación. En el momento que no estén bien elegidas las medidas o que no se tenga claro el lugar, todos los siguientes pasos tendrán una validez nula. Por lo tanto, aunque requieran una obra relativamente sencilla, es de suma importancia hacer los cálculos antes de empezar a mirar modelos de cajas fuertes.
Al margen de las medidas, la ubicación de la caja suele dar algún problema. No se puede instalar caja fuerte en pared sin tener en cuenta lo que hay en esa pared. Un ejemplo de esto son las paredes que alberguen en su interior cableado de la red eléctrica o tuberías, en esos casos, los técnicos no podrán acoplar la caja en ese lugar. Un consejo será utilizar un detector de metales para conseguir ver a través de la pared sin tener que hacer ninguna intervención en vano.
En Anloar contamos con una gran selección de modelos de cajas fuertes empotrables, incluso algunas series están preparadas para su instalación en el suelo, más pensadas para una función de camuflaje dentro del propio domicilio.
Una vez seleccionado el modelo que se ajusta a sus necesidades, junto con los accesorios y la cerradura deseada, solamente habrá que esperar al envío para proceder con la instalación
Segundo paso: Trasladar las medidas a la pared.
Una vez que tenga el producto, es conveniente realizar las mediciones para asegurarse que es el mismo modelo que eligió en nuestra web.
Una vez comprobado las medidas, se puede utilizar un lápiz para trasladar las medidas a la pared donde se va a instalar la caja. En ese proceso, se debe sumar en torno a 5 cm más en los laterales, 10 cm más en el lado inferior y unos 15 cm en la parte superior. El agujero debe ser considerablemente más grande que la caja, ya que es más fácil volver a tapar con las medidas ya hechas, que improvisando al momento.
Tercer paso: Comenzar a romper el muro.
Una vez hechas las medidas correctamente, con una maceta y cortafríos, podrá ir picando el muro justo por la parte donde ha trazado las líneas. Para evitar ensuciar o generar daños en el suelo, se recomienda poner alguna lámina de cartón o material similar justo debajo del agujero que se va a realizar.
Una vez hecho el agujero necesario, se debe limpiar todos los cascotes y polvo que haya quedado en el interior, debe quedar lo más limpio posible.
Cuarto paso: Preparar y rematar el mortero.
Dentro de un cubo, se debe mezclar el mortero con agua, siguiendo las proporciones recomendadas por el fabricante para obtener el resultado deseado.
Con la mezcla hecha, aplíquelo de la forma más lisa posible. En caso de no quedar muy regular, se pueden utilizar ladrillos para conseguir una forma plana y uniforme.
Quinto paso: Instalación de la caja en el agujero.
El último paso corresponde con la introducción en la pared, para ello, es recomendable proteger el cerco y la parte frontal de la caja para evitar cualquier tipo de daños o arañazos.
Introducida la caja en el agujero en posición correcta, se debe rellenar la parte superior con el mortero, y para los pequeños huecos, se pueden usar cascotes que saltaron durante la realización del agujero.
Para terminar, alise bien en el frente y abra la puerta para que sea más rápido el secado de la obra y así poder aplicar yeso o plaste alisador. Una vez seco el yeso, puede comenzar a pintar la pared y disfrutar de su caja fuerte.
